Una imagen óptica de un glóbulo de Bok, una nube oscura de gas y polvo en el que una joven estrella se está formando. Un nuevo documento informa sobre estrellas jóvenes que se están formando dentro de estas nubes pequeñas. Crédito: Telescopio Anglo-Australiano.Los glóbulos de Bok poseen, típicamente, una masa menor a 100 veces la masa del sol, están relativamente aisladas, y a menudo contienen núcleos que se cree son los embriones de nuevas estrellas. Es esta última característica la que hace que los glóbulos de Bok sean particularmente interesantes para los astrónomos, que quieren utilizar su relativa simplicidad, para examinar las primeras etapas de formación de estrellas en unas condiciones mucho menos confusas que en las complejos nubes moleculares en gigantes, tales como la Nebulosa de Orión. Por otra parte, los glóbulos de Bok más próximos están hasta cuatro veces más cerca que los más complejos gigantes, lo que permite observaciones más detalladas.
Tyler Bourke, astrónomo del Center for Astrophysics (CfA), fue parte de un equipo internacional de nueve científicos que estudiaron treinta y dos glóbulos de Bok con un conjunto de telescopios infrarrojos, submilimétricos y milimétricos , incluyendo el Telescopio Espacial Spitzer. Ellos informaron en el Suplemento de Astrophysical Journal de este mes que se encontraron núcleos calientes en veintiséis de estos glóbulos, y dieciocho de ellos podrían ser fechados en base a sus características de emisión de polvo, siendo de alrededor de cien mil hasta dos millones de años.
Por otra parte, el equipo encontró que casi dos tercios de estos glóbulos mostraron evidencia de estrellas múltiples, y en la mayoría de estos casos, varias estrellas que parecían ser de diferentes edades, con sólo tres casos de estrellas jóvenes coetáneas. Este último resultado sugiere que la lenta formación estelar secuencial se está llevando a cabo en estas relativamente aisladas nubes oscuras.
Fuente:
Bok Globules
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